Pura Raza Española es la denominación oficial que recibe en España la raza equina que, histórica e internacionalmente, se conoce con el nombre de “caballo andaluz”. Se trata de una nomenclatura creada en 1912 a partir de la locución inglesa “purebred” o “purebreed”. La Cría Caballar, que dependía del Ejército, abrió en España el primer libro para inscribir los caballos de raza árabe, pura raza inglés y anglo-árabe, decidiendo inscribir a los tradicionalmente llamados “caballos andaluces” como “Pura Raza Española”, más tarde abreviado como PRE, que es la denominación oficial que recibe una raza equina específica, en la que cada uno de los ejemplares que la integran presenta una serie de características comunes.
La Asociación Nacional de Criadores de Caballos de Pura Raza Española (ANCCE) es la institución que representa al PRE a nivel internacional, a ganaderos de PRE de todo el mundo y a numerosas organizaciones de ganaderos nacionales e internacionales.
El PRE es un caballo equilibrado y resistente, enérgico, noble y dócil, con facilidad para adaptarse a diversos servicios y situaciones. Es un animal de fácil respuesta a las ayudas del jinete y de boca agradable, por lo que resulta obediente y con una gran capacidad de aprendizaje.
En definitiva, se trata de un caballo que destaca por su versatilidad como resultado de la conjunción de su equilibrio psíquico, su armonía de formas, su inteligencia y su voluntad de trabajo.
Los aires del caballo Pura Raza Española son bastante notados, ya que tienen mucha soltura, mucha fuerza y elegancia. Los caballos españoles tienen un carácter noble y trabajador. La mayoría de ellos tienen un carácter espléndido para un niño y perfecto para gente que busca Pura Raza Española con coraje, con bastante doma y con elegancia.